El continuo movimiento de animales a través de la frontera irlandesa es el mayor desafío para la UE.
Las autoridades creen que se pueden tomar medidas para rastrear los productos convencionales traídos a la República desde Irlanda del Norte para ayudar a evitar una frontera estrecha. La UE está considerando una versión de "max fac" que los gobiernos de Irlanda y la UE alguna vez ridiculizaron como "pensamiento mágico". El sistema max fac incluye el uso de tecnología para rastrear electrónicamente bienes pertenecientes a "comerciantes confiables" que cruzan la frontera .
Sin embargo, esto no resolverá el problema de cómo controlar el ganado y los productos alimenticios que se mueven entre las dos jurisdicciones. La economía de toda la isla depende en gran medida de la capacidad de los agricultores para transportar animales y productos, incluida la leche, sin interrupción.Sin embargo, la única forma de evitar alguna forma de control fronterizo para el sector agroalimentario sería si Irlanda del Norte continuara operando de acuerdo con las normas de la UE.
“La aduana es la única área en la que puede funcionar el factor máximo, pero el gran problema son los animales. La agricultura es la parte más difícil y, por el momento, no hay solución, pero en la dirección opuesta ", dijo una fuente familiarizada con la preparación para el Brexit sin un acuerdo con Bruselas. La Asociación Irlandesa de Agricultores afirma que miles de animales y grandes volúmenes de productos agrícolas valen más de 2 mil millones de euros cruzan la frontera para su procesamiento cada año.